4/6/12

Los fríos del verano

 Aqui lo que pretendemos es poner la carne de gallina, más que nada para hacernos a la idea de que tenemos un pedazo de frío.
El frío para el paladar lo elaboraremos de cinco maneras: los helados con huevos, las cremas heladas, los sorbetes, parfaits y granizados.
Para no inflar las redondeces, nos tiraremos al sorvete, que en este caso le pondremos de rojo pasión, pues nada mejor que de bayas rojas.
 Los ingredientes: 225gr. de grosellas rojas y unas cuantas más para decorar, 225gr de frambuesas, y otras poquitas para decorar, 175ml. de agua, no clorada, 115gr. de azúcar, 150ml. de zumo de arándanos y dos claras de huevo.
 Quitamos los rabillos a las grosellas rojas y se pasan por un tamiz junto con las frambuesas, presionando para obtener la pulpa y añada 30ml. de agua y caliente la fruta a fuego medio durante 10 minutos.
 En otra cacerola se pone a calentar el azúcar con el resto del agua a fuego lento, removiendo hasta que se disuelva y adquiera una consistencia almibarada. No deje que tome color. Lo retire del fuego y lo deja reposar 1 hora. Cuando este frío incorpore el pure de frutas y el zumo de arándanos. Se congela la mezcla en un recipiente adecuado para el congelador, durante 3 ó 4 horas, hasta que empiece a cuajar. Se saca y se rompen los cristales de hielo con una batidora, y en ese momento se incorporan las claras, sin que queden muy firmes, y se vuelve a congelar durante otras 3 ó 4 horas.
Para conservar el sorvete se guarda tapado en el congelador.
 Lo adorna como quiera y ya está para disfrutar.
No hay que dejar mucho tiempo por las claras crudas del sorbete ¡ A disfrutarlo en pandilla !



2/6/12

El alimento cero

                


 Hoy he salido a otear por al vértice de la pirámide nutricional  y he observado en hontananza las  modas que vienen en esto del alimento, cuando los calores se imponen. Vuelve la guerra al azúcar, a las grasas y por lo tanto a las calorias -¡ Pues lo tenemos claro en la dulcería, con esto de los alimentos cero ! También han desfilados alimentos nuevos. Pues bienvenidos a todos porque no les vamos a tener ningún miedo. La dulcería resistirá a tendencias y moda, sin quitarle una pizca de vanguardia revolucionaria.
Yo no les puedo contar mucho, que ya no sepan, y menos por encontrarme encaramada a la puntita de la pirámide ¡ Yo soy todo calorías !
  Lo de cero, querrá decir sin nada, pero sin nada, y si no hay nada , pues no hay nutrientes, ni aire  ¿ Y como  pagar por la nada ? ¡ A mi estas cuentas  no me salen ! 
  Si de lo que se trata es de reducir calorias, es estupendo, en vez de comer una tarta al día, la coman cada veinticinco días, o si me apuran una vez al año, o no la coman, pero meterse una tarta cero es como tragar aire contaminado. Como en todo la moderación se impone, y si un día te pasas con la dulcería, al siguiente día, a pan y agua,  y a correr por el parque cuatro horas. Que alguien diga algo sobre el placer disfrutado.
  Que si el azúcar es malo, pues tenemos mieles, siropes, melazas y además exquisiteces naturales.  No prueben hacer un bircocho con sacarina, que no saldrá, y lo más sorprendente es que en la cocción vuela el dulzor, como un acto de rebeldía a esa porquería. Yo no sé si es bueno o malo el azúcar. Lo que si sé, que tomar doce litros de agua con azúcar y colorantes, no nos hará bien,  pero un poco de azucar, seguro que lo agradecerá el cuerpo y el cerebro.
A los que tienen la insulina juguetona con todo el amor del mundo, les pongo en manos de su endocrino, que es el que sabe y manda.
Y el resto que se informen y decidan en que lecho se hayan más agusto. Hay muchas salidas para una vida sana.
 Lo mejor, tomen de todo y lo quemen con buen movimiento.
Los alimentos nuevos  tienen dos caminos, el natural, donde puestos a investigar descubre saludables propiedes a precio de doblones de oro, y el artificial alimento cura todo, lo mismo te quita un dolor de cabeza, que te tiñe  el cabello de naranja, o te hace redondo el pensamiento. Una y mil mentiras. Pero lo sigan comiendo, su salud se quejará un día
 Si les da miedo el azúcar, no lo tomen , pero no se enganchen en el sucedaneo más malicioso.
Hay más caminos para tener a la caloría a raya
 Pues yo sigo con una propuesta  única:  apostar por el alimento sano, rebosante de nutrientes.
¡ No me gustan las mafias químicas !


 

                                                                  
                             



 Si lo suyo es lo radical, pues no dejen de ver este video y me cuenten como lo hace ¡ Es de un ahorro tremendo. Eso, vivan de la luz y que le aproveche.

     http://vimeo.com/34326801