El octubre de Shiller

 Ayer salimos a pasear por la cuidad de Schiller, aunque nació a la vuelta de la esquina . Pero no les voy a contar la historia que ya conocen del dramaturgo de Stuttgart.
 Ya me dirán ustedes que no parece Marbella, aunque dicen que lo  de Marbella lo inventó un alemán, no se si también la corrupción, pero yo me referia a lo del buen tiempo. Aqui no hay mar, hay trabajo , mucho trabajo y una cuidad para recorer sin complicaciones. Verá los coches más exclusivos  que imaginó aparcados por la calle, pues estamos en zona de inventores de coches, de poetas y filisofos, de balnearios, de tartas, y una buena cocina; y como no de barones.

 
  ¡ Disfruten de lo que puedan !